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CUANDO AL DECIR “BUENA SUERTE” REALMENTE SE SINTIÓ DECIR “¡ADIÓS!”

19.02.2021

Escrito por Eric Salonen


Cuando uno tiene el privilegio de ser parte de la misma organización durante casi dos décadas, una de las cosas que tal vez simplemente damos por sentado son los contactos que hacemos a lo largo de nuestra carrera. Algunos de ellos pueden ser contactos con los que tenemos comunicaciones fugaces, como un correo electrónico a un proveedor; una llamada telefónica a un transportista; o incluso una reunión con un cliente. Estas son cosas que hacemos estrictamente como parte de nuestras labores diarias, la mayoría de las veces, sin pensar mucho en ellas una vez que se han completado. Sin embargo, a veces tenemos la suerte de poder colaborar con las mismas personas durante un periodo de tiempo largo e inevitablemente establecer relaciones con ellos sin ni siquiera intentarlo. 

Uno de esos contactos me escribió hace unas semanas solo para hacerme saber que iba a iniciar una nueva etapa en su vida y para agradecerme por nuestros años de haber trabajado juntos. “Wow”, escribí junto con un mensaje de felicitación. Y cerré mis saludos con un simple “¡Buena suerte!” Después de haber dado clic enviar en el correo electrónico, me detuve y pensé en la rotundidad de ese momento, y que probablemente no tendré la oportunidad de trabajar con esa persona nuevamente ya que la vida nos lleva en diferentes direcciones. Este es alguien a quien conozco desde hace años. Alguien a quien he escrito innumerables correos electrónicos, con quien he intercambiado innumerables llamadas telefónicas y con quien me he reunido en persona múltiples ocasiones. Eso ahora esta cambiando. Les deseé “Buena suerte”, pero sentí que acaba de decir “¡Adiós!”

Durante mi tiempo en IMV Technologies USA, una de las cosas que más he apreciado son las relaciones formadas con las personas en los lugares de trabajo de nuestros clientes a lo largo de los años. Nuestros clientes no so simplemente clientes; también son nuestros compañeros, y sé que tengo mucha suerte de trabajar con ellos… especialmente, cuando lamentablemente tengo que decirle a unos de ellos: “Buena suerte”. 


Los puntos de vista expresados en el blog de IMV Technologies no representan necesariamente los puntos de vista del Grupo IMV Technologies, sino únicamente los del autor de la publicación del blog.

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